Los estudiantes del Centro Etnoeducativo sede Pulitchamana, en la comunidad Wayúu, están dando un gran paso hacia un futuro más saludable, a través de talleres y actividades lúdicas, los jóvenes están aprendiendo sobre la importancia de una alimentación balanceada y sostenible, aprovechando los recursos naturales de su entorno.
Promover el consumo de productos locales y de temporada es especialmente relevante, ya que fomenta la sostenibilidad y fortalece la economía local. Además, cultivar huertos escolares y familiares les brinda a los estudiantes habilidades prácticas y les enseña sobre la conexión entre la agricultura y la alimentación, lo cual es esencial para la seguridad alimentaria.
Estas acciones no solo mejoran la calidad de vida, sino que también fomentan un sentido de comunidad y colaboración, al priorizar una alimentación saludable, están dando pasos importantes hacia la prevención de enfermedades y el fortalecimiento de su sistema inmunológico.