Pese a las dificultades que afronta cada participante en su vida personal, los adultos mayores que asisten al programa “Bienestar para la Persona Mayor” en Prado han puesto en manifiesto su creatividad y también su entusiasmo en las clases de pintura de floreros y cerámica. En cada actividad no solo se han capacitado en diversas artes, sino que también han descubierto habilidades y han potenciado sus cualidades.
Es así como a medida que se ha desarrollado el programa todos han logrado un avance y han conseguido superarse, aprender a construirse como individuos y a socializar con otros. Muchos de ellos encuentran en las actividades una distracción o una oportunidad para aprender un arte, pero en conjunto todos son conscientes que este programa promueve en ellos el envejecimiento activo que les permite sacar el máximo provecho de sí mismos en esta etapa de su vida.