Al sur de la ciudad las personas sordas disfrutan las clases de comunicación escrita, un espacio otorgado para que las personas con discapacidad auditiva pueda comunicarse y de esa manera logren alcanzar un alto grado de conocimiento como lo puede hacer una persona oyente.
Gracias a la oportunidad brindada por la Dra. María Luisa, se comparten estos espacios con mucha armonía en cada clase, las personas sordas aprenden el uso de la lengua española, a redactar cartas, identificar conceptos, aclarar definiciones y poder comunicarse adecuadamente con una redacción en español correcta.
La motivación invade a todos los voluntarios capacitadores, quienes ven el esfuerzo de los estudiantes por aprender y aprovechar el tiempo en todas sus facetas, viviendo en cada clase un momento inolvidable con la participación de estos grandes redactores.
