Gracias a la donación de la pasteleria Don Jacobo de la ciudad de Bucaramanga 12 niños de escasos recursos se convirtieron en grandes pasteleros por un día, quienes con alegria, colores, crema y mucho pastel le dieron una alta dosis de felicidad a su vida y las nuestras.
Llenaron de colores y crema sus pasteles que finalmente empacaron y compartieron.
Un perrito que en algunos parecian cocodrilos, cerditos y otros animales llenos de imaginación fueron las lindas creaciones de los niños del taller de cocineritos.
