Más de 500 habitantes de la vereda San Carlos, ubicada en el municipio de Caparrapí, Cundinamarca, recibieron al equipo de voluntarios de la Fundación y a la delegación de la Gobernación de Cundinamarca, los cuales aunaron esfuerzos para hacer posible que una Brigada Integral de Salud beneficiara a esta población con atenciones médicas especializadas, talleres de convivencia y donaciones.
Desde la ciudad de Bogotá y los municipios de Puerto Salgar, Cundinamarca, y La Dorada, Caldas, se desplazaron los voluntarios de la Fundación con destino a Caparrapí, lugar a partir del cual partieron con rumbo a la vereda San Carlos a donde, transportados en bus, llegaron tras 2 horas de trayecto por trocha. Allí, previo a ser atendidas, las personas que se reunieron, provenientes de diferentes veredas aledañas, participaron en una sensibilización en la que se expuso la labor de la Fundación y también intervinieron el Ejército y los representantes de la Gobernación Departamental.
En las instalaciones de la Institución Educativa Departamental San Carlos se organizaron los espacios para brindar a esta comunidad las atenciones médicas especializadas en medicina general, medicina interna, genética humana, enfermería, fisioterapia, quiropraxia, fonoaudiología, optometría, nutrición, psicología, odontología y ginecología. Además, se realizaron terapias respiratorias, audiometrías, citologías y se tomaron exámenes de laboratorio con procesamiento inmediato.
Debido a que para ellos el acceso a las atenciones médicas es limitado, los beneficiados encontraron en esta jornada una respuesta a sus carencias y padecimientos. Ejemplo de esto fueron, por un lado, las personas que volvieron a sonreír y restauraron su funcionalidad bucal gracias a las prótesis dentales que los profesionales moldearon de acuerdo a las necesidades de cada uno. Por otro lado, tras haber sido examinados por la optómetra, muchos de ellos recibieron gafas preformuladas que compensarán sus imperfecciones visuales. Se entregaron, igualmente, 2 órtesis ortopédicas de rodilla y medicamentos,
Además de lo anterior, se ofrecieron talleres complementarios para promover la seguridad y la convivencia ciudadana enfocados en comunicación asertiva, solución de conflictos y manejo de diferencias, buen trato y economía del hogar. De igual manera, se destinó un espacio para la recreación de los niños en el que además de disfrutar de bailes y juegos, aprendieron sobre el cuidado de los dientes y recibieron kits de higiene oral y juguetes.
Esta Brigada culminó con éxito gracias al trabajo sinérgico de la Fundación Internacional María Luisa de Moreno, el Ejército, el cuerpo de Bomberos, la Alcaldía y la Secretaría de Gobierno de Cundinamarca. Este equipo demostró en conjunto que la unión de esfuerzos y el trabajo en equipo generan grandes resultados y, en este caso, concluyó con el aporte al bienestar y la felicidad de la población de Caparrapí.