Voluntarios de la Fundación llevaron alegría y bienestar a más de 130 niños y niñas de Chimalhuacán, Estado de México, a través de un taller de repostería infantil.
Con el apoyo de un chef especializado, durante la divertida jornada los asistentes aprendieron técnicas básicas de decorado de pasteles, mientras de manera lúdica reflexionaron sobre el valor de la amistad.