El Carmen de Viboral, un municipio antioqueño reconocido por su tradición en la cerámica artesanal, fue el escenario de una jornada de apoyo para la niñez, donde 53 niños y niñas recibieron con alegría sus kits escolares y llenaron su corazón de compromiso con el cuidado del medio ambiente.
Más que útiles escolares, cada entrega representó un puente hacia un futuro mejor, acompañado de una enseñanza invaluable: el cuidado del planeta a través de los valores de solidaridad y austeridad. En este espacio, nuestras eco-heroínas lideraron una actividad divertida e interactiva, donde los niños aprendieron a clasificar residuos de manera correcta mientras cantaban y reían. Una experiencia que demostró que aprender puede ser emocionante y transformador.
Para finalizar la jornada, sorprendimos a nuestros invitados con la presentación cultural del Show de Hormy, el cual llenó de risas, aprendizajes y emoción a todos los asistentes, dejando un sentimiento de gratitud y la certeza de que cada pequeño gesto deja una huella gigante en las vidas de estos niños.
