Bajo el principio “Mi escuela, mi segundo hogar” los estudiantes de la Institución Educativa Puerto César en el Urabá antioqueño de Colombia aprendieron sobre la importancia de cuidar su escuela.
En la sede educativa Puerto Bello de esta institución, la Fundación realizó un encuentro vivencial en donde los niños se convirtieron en ingenieros para recorrer las instalaciones y reconocer los lugares en donde se deben hacer reparaciones. Esto se hizo para incentivar el cuidado de la escuela, aquel lugar que los recibe como un segundo hogar y en donde adquieren aprendizajes y habilidades para su desarrollo y así mismo, la transformación social de sus entornos.
Esta actividad se realizó en el marco del programa Mi Nueva Familia, que hace parte de la Línea Estratégica Ayúdanos a Educar de la Fundación y que tiene como finalidad apoyar la educación de niños y jóvenes, especialmente en zonas apartadas del país. Por medio de esta actividad se buscó que los niños cuiden las instalaciones de su institución para gozar de una educación digna y de calidad.